Clase Reptilia
Si pudiéramos dar vuelta hacia atrás las
hojas en que está escrita la Historia del tiempo, retornando en
cada página un millón de años, antes de la segunda página el
Homo sapiens, rey de la creación, habría desaparecido del
escenario. A la altura de la cincuenta no encontraríamos
mamíferos y aves como los acutuales, y en las llanuras y selvas
aparecerían extrañas fieras que llevaban sus cachorros en
bolsones marsupiales. Al llegar en nuestro viaje retrospectivo a
la ciento cincuenta, muchas de las grandes rocas y extensos
fragmentos de la tierra despertarían de su sueño milenario
animándose bajo el signo de la vida.
En sentido completamente inverso a la afirmación de Ovidio «quo
comque aspicio nihil est nisi mortis imago ». Donde mirásemos
encontraríamos la imagen de la vida.....
Donde vaya nuestra vista encontrará que los lugares que
constituyeron el alegre vivir de los mamíferos y de las aves, se
encuentran ocupados por un equivalente reptiliano
desenvolviéndose con igual intensidad el drama de vivir...
Cada nicho ecológico constituye una frontera vital, donde las
especies ejercen su tuición. Aunque los nichos guardan cierta
permanencia sin embargo las especies son reemplazadas en el
transcurso del tiempo. Los Ictiosauros fueron sustituidos en el
idioma reptiliano por los delfines en el vocablo de los
mamíferos. Los reptiles voladores o Pterodáctilos, que ocupaban
los parajes a la orilla de los mares fueron desalojados y
reemplazados Por los Petreles, Pelícanos y cormoranes. Los
pacíficos y gigantes herbívoros de los pantanos, dejaron sus
anfibias residencias a los Hipopótamos y elefantes. Los
Plesiosauros, que alternaban sus costumbres entre las zambullidas
en busca de peces y el reposo en las rocas, cedieron su hábitat
a los lobos marinos y a las focas.... En pocas vueltas de
páginas, hemos visto todo igualmente ocupado, que hoy, por seres
muy distintos, pero con cierta equivalencia ecológica.... Sin
embargo esto puede resultar peligroso, por cuanto sabemos que los
fenómenos ambientales se encuentran sujetos a fluctuaciones. A
veces el impacto de ellas repercute tan profundamente en los
animales superespecializados, que son suficientes para determinar
su extinción.
Este viaje hasta el pasado nos ha mostrado un reino tanto o más
majestuoso que el que ocupan en la actualidad los mamíferos. El
imperio de los reptiles comprendió miles de formas, adaptadas a
medios sujetos a innumerables pruebas, determinándose con ello
su diversificación en órdenes que se aproximaron a la veintena.
Hoy quedan apenas cuatro moléculas de un pasado grandioso... y
la antigua pujanza cada día va en disminución. De los antiguos
Rincocéfalos, que ejercieron su dinastía en el Triásico
perdura una sola especie, reducida a miserables poblaciones,
aferradas a inhóspitos islotes de la costa neozelandesa. La
vasta comunidad de los cocodrilos es en la actualidad
representada por un exiguo número de especies. « Etiam periere
ruinae » escribía Lucano después de la batalla de Farsalia y
estas tristes palabras parecen encontrar un sentido en la
historia biológica de los reptiles, por cuanto también sus
ruinas perecerán.
..... Resulta difícil comprender la extinción de una fauna tan
extensa, como a la vez de los mecanismos que han intervenido en
el exterminio. Pero parece bien probable que ellos han sido
varios y han golpeado en distintos ángulos de su ciclo
biológico. ... Pero es a partir del final del Cretáceo cuando
los grandes reptiles marchan hacia su ocaso. En el Paleoceno, a
comienzos del Terciario, no encontramos reptiles notablemente
llamativos como los que vimos en el Mesozóico, y todos sus
nichos ecológicos empezaron a ser ocupados por los mamíferos.
En lo que respecta a su origen, los reptiles derivan de un grupo
primitivo, Cotylosauria, el que a su vez
está relacionado con anfibios del grupo de los stegocefalos. Los
cotylosauros dieron radiaciones evolutivas que determinaron las
tortugas, los ictiosauros y plesiosauros, es también muy
probable que la radiación que dio origen a los mamíferos y
reptiles - mamíferos se desprendiera tempranamente. Más tarde,
un grupo del Triásico, los Thecodontes, originaron las raíces
que determinaron los reptiles modernos, los cocodrilos, los
pterodáctilos y los dinosauros que se diversificaron
considerablemente en el Jurásico y Cretáceo. Con respecto a las
aves, éstas también surgieron de una radiación del tronco de
los reptiles, posiblemente en época muy temprana.
En lo que respecta a Chile, es posible hablar de este país desde
el Cretáceo Medio. Todos los terrenos conocidos con anterioridad
a esa fecha son de origen marino. Solamente en la Ternera
(Copiapó), en Gomero (valle del Bío-Bío) y en el cerro Nielol
(Temuco), se conocen depósitos continentales del Rético que
poseen restos vegetales como helechos, palmeras y fósiles
marinos. Probablemente sean denudaciones de montañas y
representan las Gondwánidas. Los otros terrenos que encontramos
en Chile y que forman principalmente la cordillera de los Andes,
son de formación porfirítica, constituida por grandes derrames
submarinos de lavas, diabosas y metafiros que se suceden a partir
del Lias hasta el Cretáceo Inferior, y forman el material más
importante en la elaboración del subsuelo del país. La
cordillera empezó a plegarse desde el Cretáceo Medio. No
conocemos restos orgánicos que nos permitan concebir la
organización de la vida en la cordillera recién formada, pero
sí se conoce bien la existencia de gigantescos Dinosaurios y
Saurópodos en la Patagonia Meridional, adaptados a la vida en
los pantanos.
Los depósitos marinos de aquellas épocas han podido ser
estudiados, por ej. en la isla Quiriquina y en Algarrobo. Allí,
junto a numerosos restos conchíferos, se han encontrado trozos
de pocos reptiles marinos, que constituyen todo nuestro arsenal
fósil...
Los reptiles sobrevivientes comprenden el orden Rhyncocephaha que
incluye exclusivamente una especie de Nueva Zelandia. El orden
Loricata que comprende los cocodrilos, gaviales, caimanes y
aligatores. El orden Testudinata, de viejísima estirpe, al que
pertenece la totalidad de las tortugas. El orden Sguamata que
incluye a lagartos y serpientes.
(...)
Los reptiles son poiquilotermos, su temperatura fluctúa con el ambiente, por lo que demuestran mayor actividad.
Extracto de "Reptiles de Chile" de Roberto Donoso-Barros , 1964
A continuación te presentamos, a los reptiles que hemos podido capturar con nuestras cámaras fotográficas, para colaborar con esta sección haz click AQUÍ.
Para cualquier comentario, colaboración o corrección taxonómica, haz clic AQUÍ.